Viaje a Lisboa

El despertador me despierta. Son las cuatro de la mañana. Si quiero ver el paisaje durante el viaje, necesito ducharme y salir. La ruta pasa por Vitoria. Esta noche está muy oscura, sin luna. Cuando salgo no está muy luminoso pero un poco antes de Vitoria el cielo esta azul. Un signo de esperanza. Después de conducir por la autovía me dirijo a la carretera nacional y sigo hacia Burgos a través de pequeños valles y simpáticos pueblos. Después de Burgos todo lo que queda es autovía. 700 kilómetros de la misma carretera, pero el paisaje es muy hermoso y el tiempo también. Sin nubes y muy claro, puedo ver las montanas grandes incluso desde muy lejos. Después de cruzar la frontera y entrar en Portugal cerca de Golega, entro en la carretera nacional. Viajo entre pueblos muy pequeños, con otra arquitectura. Muy bonita, muy diferente con muchas colores. Me siento como que estoy muy cerca de mi destino. Finalmente veo Lisboa. Paso a través de la ciudad por la playa. Ese es mi verdadero destino…