Mi primer día en Donostia – el recuerdo inolvidable!

Fue las 7 de la tarde estuve en la variante de Burdeos (Bordeaux - Francia). Cerca de la ciudad había mucho tráfico, no se podía ir rápido. Después de 8 horas de conducir, estaba cansado, bebiendo mucho RedBull, solamente no quería quedarme dormido.

Tuve dos opciones o buscar un lugar para dormir que no es tan fácil casi por la noche, o correr hasta la ciudad de San Sebastián. Afortunadamente después de 10 minutos el tráfico mejoró. Entonces podía ir más aprisa. En el peaje antes de Donosti me di cuenta que no tenía lugar donde dormir. Llame a mi hermano que está en Polonia, para que me buscase un hostal o camping. A las 9 vi a Jesucristo desde lejos, en este momento no sabía que estaba casi en mi punto de destino.

Entre en la ciudad en mi coche, tenía solo la dirección de un hostal, que me envió mi hermano, sin embargo no tenía ni idea de donde estaba ese lugar. Aparqué mi coche en la primer acera y pregunte a un chico donde estaba el centro, pero él no sabía, quizás estaba asustado, de un tío con barba de un coche con matrícula de otro país, que aparcaba su coche encima de la acera.

Por lo tanto seguí conduciendo por el camino más limpio, más usado por la gente, porque siempre lo usan más los que van al centro de la ciudad y por eso no hay suciedad en la calzada. Abrí la ventana y di el papel con la dirección a un taxista y pedí que me llevara allí. La calle se llamaba Zabaleta, el primer lugar que conocí en San Sebastián. Ahora como soy un veterano de Erasmus me gusta a veces pasar por allí.

Andres Carlos Delgado de Navarra